El proyecto ha logrado unificar comedor y cocina y ampliar el espacio renunciado a una de las habitaciones. Ahora encontramos una enorme sala abierta a la luz natural que, para cuando esta se marcha, queda iluminada con los plafones STAN. Y de la misma colección, pero en versión aplique, las luminarias están instaladas en la cocina, justo encima de la pica.


Algo parecido han hecho con la habitación infantil, antes la de matrimonio, que junto con el anterior lavadero ahora acoge una sala grande. Decorada con un papel pintado de estrellas y luna, el aplique LUNA está instalado justo en el centro. Proyecta una bonita luz indirecta alrededor de la estructura perfecta para acompañar tardes de juegos y dulces sueños.


Una reforma integral cuyo resultado es un hogar de espacios abiertos moderno y funcional, y que ha encontrado en Faro Barcelona, una solución para la iluminación en cada habitación.

